¡Castigar al pueblo filisteo con
almorranas!... ¿Cómo se puede ser tan cruel?¿Cómo un Dios que se precie de tal,
puede ser tan cruelísimo?
Sácales los ojos; cercénales las manos; que
pierdan las finales de La Liga durante treinta generaciones; que nunca encuentren
aparcamiento; quítales los móviles; hazles sufrir veinte legislaturas de Rajoy.
Pero…¡¡¡almorranas!!!
Y, encima quiere que le adoremos y le
tengamos cariño ¡venga ya, hombre, eso no tiene perdón de Dios!. Pobres filisteos.
EL
BOBO DE KORIA
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