UCRANIA: EL MINISTERIO DE LA VERDAD
Extraído del artículo de JOSÉ
MANZANEDA (Fuentes Cubainformación.tv) Publicado en Rebelion.org(28-03-2022)
Precisamente
por relatar la situación en Donbass, el diario francés “Le Figaro” censuró un
reportaje de su corresponsal Anne-Laure Bonnel . El coronel español Pedro Baños
decidió abandonar sus apariciones en televisión tras recibir serias amenazas.
La razón: el tono neutral de sus análisis sobre el conflicto…
Facebook
e Instagram han levantado la prohibición de los mensajes de odio si estos son
contra Rusia, permitiéndose los llamados a matar a los presidentes ruso y
bielorruso y los elogios al Regimiento nazi ucraniano Azov.
La
periodista rusa que protestó en televisión contra Putin y a la que solo le han
impuesto una multa, es ya una estrella mundial. Pero sobre un periodista
europeo, el vasco Pablo González, que lleva casi un mes encarcelado e
incomunicado en Polonia, acusado de ser “espía ruso” por informar sobre el
drama en Donbass, el silencio mediático es casi absoluto.
El diario
español ABC eliminaba las noticias que había publicado, en 2016, sobre
violaciones a niños y niñas por parte del ejército de Kiev.
Llaman
“Centro para el Mantenimiento de la Paz” a una base de entrenamiento de
mercenarios. Palabra –por cierto- prohibida en los medios: son “combatientes
extranjeros”. Así despedía la entrevista a uno de ellos una reportera española:
“Esta misma tarde él se marcha en un autobús hacia España, preparado con
refugiados ucranianos y en el que van a ir algunos de los combatientes
extranjeros españoles”. Este mercenario de ultraderecha regresará a su casa sin
ser detenido ni interrogado. Sin pasar el calvario policial y judicial que
sufrieron ocho milicianos de izquierda al regreso de Donbass en 2015, tras ser
etiquetados por los medios españoles como “prorrusos”.
¿Algún
informativo ha hablado sobre Fahrudin Sharafmal, presentador ucraniano que, en
directo, hizo un llamamiento a degollar a todos los niños rusos? ¿Y sobre
Gennadiy Druzenko, director de un Hospital Móvil de Voluntarios, que ordenó
castrar a los soldados rusos por ser “cucarachas”? ¿Y sobre los actos de
humillación pública, en Ucrania, a personas gitanas, pintadas de verde y atadas
a postes? Nada.
El
Regimiento Azov, compuesto por neonazis, es una fuerza voluntaria de reserva de
las Fuerzas Armadas de Ucrania (28) (29). Y sus miembros –nazis- son
entrevistados, como si tal cosa, por medios como la CNN. Azov ha recibido armas
de gobiernos europeos, como el de España : compradas con mil millones de euros
del “Fondo Europeo en Apoyo –no se rían, no- a la Paz” (32). En el canal
español Cuatro, un “experto” daba –con toda tranquilidad- lecciones de cómo
emplear este armamento para «matar más rusos».
¿Que el
presidente Volodímir Zelenski haya otorgado el título de Héroe Nacional de Ucrania
a Dmytro Kotsyubail, líder del grupo paramilitar Pravy Sektor, artífice de la
masacre de los sindicatos de Odessa, en 2014, en la que 46 personas fueron quemadas
vivas? No lo oirán.
Hay que
convertir un tanque ucraniano que aplasta un coche en un «tanque ruso» (40). Un
misil ucraniano que derriba un bloque de viviendas en un “misil ruso”. Una niña
de Donbass víctima de las tropas ucranianas, en una niña de Kiev.
Hay
cientos de fake news parecidas. El telediario de Antena 3, el más visto en
España, abrió con imágenes de una explosión en China como si fueran bombardeos
de Rusia.
“Una
carnicería”, titulaba en portada el diario italiano La Stampa, con la foto de
civiles masacrados en un bombardeo ruso. ¿Ruso? No. La imagen era de Donetsk
(Donbass), donde murieron 30 civiles por un misil… ucraniano.
4.
Racismo clasista con ojos azules
La loable
solidaridad con la población refugiada de Ucrania pasa, una y otra vez, por un
filtro de racismo clasista. Una periodista de NBC: «Estos no son refugiados de
Siria, son de nuestra vecina Ucrania. Son cristianos. Son blancos. Se parecen
mucho a nosotros». Un reportero de CBS: “Este no es un lugar, con todo respeto,
como Irak o Afganistán, que tiene conflictos hace décadas, este es un país
relativamente civilizado y europeo”. Un entrevistado por BBC: “Es gente europea
con ojos azules y pelo rubio que está siendo asesinada”. Un testimonio en La
Sexta: “No son los niños que estamos acostumbrados a ver en televisión, sino
niños con los ojos azules y eso es muy importante”.
Y como
guinda, un informativo de 13 TV (y no es una parodia): “¿La situación de los
refugiados? Pues te la puedes imaginar. Y es que es gente como tú y como yo. He
visto bolsos de Dolce & Gabbana, ropa de Louis Vuitton, gente que podría
estar en Madrid perfectamente, es gente como nosotros y vive en unas condiciones
totalmente deplorables”.
Mientras
la Unión Europa ha dado la orden de regularizar, de manera extraordinaria, a
millones de personas procedentes de Ucrania, la población africana sigue siendo
recibida a palos por las policías europeas. Eso, quienes llegan. En el último
naufragio de marzo, cuarenta y cuatro personas morían frente a las costas
canarias.
“Dos
individuos ya identificados por la Ertzaintza (policía vasca) mostraron su
apoyo a Rusia. Banderas a favor de Rusia en (el campo de) San Mamés. Banderas y
pancartas. La Ertzaintza ya ha identificado a los autores”: esto decía el
comentarista catalán Josep Pedrerol, tratando de criminalizar a quienes portaban
banderas de la República Popular de Donetsk (en Donbass), un pueblo masacrado,
durante ocho años, por el ejército de Ucrania y que votó masivamente por su
independencia. Pero en los medios leemos que eran “pancartas a favor de la
invasión rusa”.
La caza
de brujas ha llegado también a la cultura. El ruso Valeri Guérguiev fue
destituido como director de la Orquesta Filarmónica de Múnich. Los teatros
europeos, como el Teatro Real de Madrid, están cancelando las actuaciones del
Ballet Bolshoi. La Orquesta Filarmónica de Cardiff (Gales) ha sacado de su
repertorio las obras de Tchaikovsky. Debido a las protestas, la Universidad de
Milán tuvo que dar marcha atrás a su decisión de eliminar un curso sobre
Dostoiewski. Y la de Córdoba, no solo ha roto relaciones con el profesorado de
Rusia, sino que amenazó con hacerlo con el de Cuba e Irán “si no rechazaban la
invasión rusa”. La Rectora de la Universidad de Valencia llamó a la “auto
deportación” de todo el estudiantado ruso.
“Criminal
de guerra”, acusan a Putin en los medios que jamás aplicaron dicho término a
George W. Bush, José María Aznar o Tony Blair, tras la invasión de Irak, que
provocó centenares de miles de muertes.
España
acaba de seguir el rumbo que marcó Donald Trump en relación a Marruecos: acepta
su ocupación ilegal del Sahara y da una puñalada por la espalda al pueblo
saharaui. Que sigue sufriendo los bombardeos marroquíes.
Hoy
vivimos un macartismo en estado puro. Una Dictadura Global. Frente a la que
será imprescindible organizar la resistencia.
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EL BOBO DE
KORIA (RECOPILADOR)