CUARTETO
MANUEL
VÁZQUEZ MONTALBÁN
14 junio de 1939. BARCELONA. España
18 octubre de 2003. BANGKOK. Tailandia
-¿A qué atribuye usted que sus amigos
no tuviesen hijos? Es curioso. Ni una pareja ni la otra.
Probablemente a que eran egoístas,
pienso, pero digo:
-Eran muy inteligentes.
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¡Si se pudiera extirpar la capacidad de
mirar dentro de uno mismo!
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Aunque era evidente que Carlota
interpretaba el papel de dama evanescente otorgadora del beneficio universal de
su presencia…
--
Para ellos, su mundo social era un
paisaje predestinado del que podían esperar algún cheque de cuando en cuando,
un respaldo económico inicial para el negocio de antigüedades y algún día una
herencia suficiente que les permitiera seguir siendo lo que eran hasta el fin
de sus días, es decir, seguir siendo importantemente nadie, considerablemente
nada. (…)
El franquismo fue para ellos un
aquelarre residual, presidido por un abuelo temblón que no les forzaba a
situarse en lo histórico, y la cultura, una propuesta neutralizada que no tenía
que apostar ni demostrar nada.
--
-Se casó con una mujer mayor que él. Le
hace de madre.
-Y le ayuda a cubrir las a apariencias.
Un marica siempre es un marica. Parecen mansos, pero tienen un cuchillo
guardado siempre, y un día u otro te apuñalan, un día u otro se desmelenan.
--
La policía y los jueces necesitan
cerrar casos y construir estadísticas de eficacia. Si tú les cierras el caso
con una apañada verosimilitud puedes asesinar al mismísimo Papa de Roma.
--
Aquel feto maloliente y flotante,
viscoso como un aborto de gallina y malintencionado como un presunto hombre o
presunta mujer, nos iba a unir para siempre. Era otro yo amenazante y
aniquilador que me quitaría el espacio y el tiempo, el derecho a mi propia
mismidad.
--
EL
BOBO DE KORIA (RECOPILADOR)
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