Cada dia ens assassinen! Per sistema

BESTIARI - JOAN FUSTER


Dentro de la casa, al abrigo del fuego, alguien desgranaba las doradas espigas del maíz y con los granos iban cayendo las palabras hasta formar historias que yo recogía con ávida fruición y también, alguna vez, con espanto.

DÍAS DE LLUVIA -- PILAR CIBREIRO


Nunca odié a un hombre lo suficiente como para devolverle sus diamantes.

ZSA ZSA GABOR


- Una sonrisa para este vagabundo,
caballero.
            Dejad en mis pupilas,
bondadosa señora,
algo de belleza y de la luz
que hay en vuestra mirada también triste.

De "MENDIGO" -- ÁNGEL GONZÁLEZ


-¡No me toques, que vengo ligeramente herido...!
GENERAL PRIM (A SU ESPOSA, AL LLEGAR A SU HOGAR DESPUÉS DE RECIBIR OCHO BALAZOS)

Las calvas iluminan el patio de butacas. Son la batería de candilejas de la sala.
RAMÓN GÓMEZ DE LA SERNA

Es la primera vez que Fontenelle sale de casa para no ir a comer a la de otro.
ALEXIS PIRON (EN EL ENTIERRO DE FONTENELLE)

Los tranvías trazan a medio-aire su surco móvil amarillo y numerado. Y, de minuto en minuto, sensiblemente, las calles se desdesiertan.

EL LIBRO DEL DESASOSIEGO -- F. PESSOA  

                                  

El día que la mataron
Rosita estaba de suerte;
de tres tiros que le dieron
uno solo era de muerte.

CORRIDO MEJICANO                   

                                                                      

... las bolitas que defecan, las cagarrutas, tan sólidas que no manchan los dedos si se las coge.

PRETÉRITO IMPERFECTO – CARLOS CASTILLA DEL PINO          

                                                          
El hombre desciende del mono, pero los argentinos descendemos del barco.

J. L. BORJES                      


Guarde Dios a vuestra merced, y a mí de vuestra merced.

EPÍSTOLAS DEL CABALLERO DE LA TENAZA – QUEVEDO          


-Guapetona.
Mientras la mulata surca el asfalto con una majestad de petrolero zarpando del puerto.
ANTÓNIO LOBO ANTUNES (EL PAÍS 19-2-2005)        
           

Las estalactitas lloraban isócronamente, llenando las sombras frías de un ruido de relojes.
ALEJO CARPENTIER – RELATOS         
           
Conocemos el sonido de la palmada de dos manos, pero ¿cuál es el sonido de la palmada de una sola mano?
UN KOAN ZEN   

Pero las palomas, esos animales feroces que la ignorancia de los artistas ha escogido como símbolo de la Paz, ...
EL GRAN ARTE -- RUBEN FONSECA    
           
-¿Por qué en las películas la gente besa de lado? preguntó,
-¿De lado? -dije-. Era un problema que me había intrigado en mi infancia. Dije que suponía que era porque las narices de los actores resultan demasiado grandes como para que puedan besarse de frente.
PARA ESMÉ, CON AMOR Y SORDIDEZ -- J. DE. SALINGER
                       
-¡Mal rayo los parta! -gritó el capitán-. ¡Menuda calma chicha! Gray, silba para que corra el aire.
LA ISLA DEL TESORO -- R. LOUIS STEVENSON              

Muchas de las culturas que no llegaron a usar la rueda se hartaron de perforar discos circulares para collares, muchos de los cuales debían salir rodando ¡cada día! por el suelo de los talleres de los artesanos.
A MÁS CÓMO, MENOS POR QUÉ – JORGE WAGENSBERG           

SALIMOS A CAZAR patos silvestres. Me agazapé. ¿Qué me empujó a apuntar a aquel hombre rechonchito y ridículo, con sombrero tirolés, con pluma y todo?
CRÍMENES EJEMPLARES -- MAX AUB

El perro nos adula porque piensa que somos débiles y que nos rendimos al elogio. Eso a mí me molesta. Los gatos, en cambio, nos observan a distancia y esperan, lo que implica algún respeto.
MEMORIAS BISIESTAS -- R. J. SENDER

Perros, ninguno. Al fin todos son hijos de perra. Los gatos me gustan y he querido mucho a algunos.
MEMORIAS BISIESTAS -- R. J. SENDER


Pequeñas causas: una mosca posada en el pentagrama del músico miope le hacía dar una nota falsa que desconcertaba el conjunto con gran escándalo del pulquérrimo director.
MEMORIAS BISIESTAS -- R. J. SENDER

 (Improntas fósiles.) Oh gato que esta noche has dejado tus huellas en el cemento reciente de la acera; por tan gentil testimonio de tu paso, yo te deseo tan larga eternidad como la del dinosaurio que dejó sus pisadas en el barro fresco de hace millones de años.
VENDRÁN MÁS AÑOS MALOS Y NOS HARÁN MÁS CIEGOS -- R. SÁNCHEZ FERLOSIO

No confíes en tu corazón, está ávido de tu sangre.
PENSAMIENTOS DESPEINADOS -- S. J. LEC

EL BOBO DE KORIA (RECOPILADOR)



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