LLUVIA FINA
LUIS LANDERO
25 marzo de 1948. ALBURQUERQUE. España
Hay
algo en las palabras que, ya de por sí, entraña un riesgo, una amenaza, y no es
verdad que el viento se las lleve tan fácilmente como dicen.
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Y también sabía o
intuía que, si los rencores y agravios habían permanecido aletargados hasta
entonces, es porque apenas hablaban entre ellos, solo de tarde en tarde y por
teléfono para felicitarse los aniversarios y las Pascuas, o contarse alguna
novedad.
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…pero
que la madre era muy ansiosa para el dinero y todo le parecía poco y siempre
quería más, y que por eso, por su codicia, sacrificó la vocación y el futuro de
sus hijas. “Y eso, Aurora, es muy difícil de olvidar y de perdonar”.
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“Gracias
por el consuelo, Aurora, pero desengáñate, mamá mató al gato. Sin remordimiento
y a conciencia, como todas las cosas que ha hecho en la vida”.
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Una
vez, en algún momento de su primera juventud, quizá con quince o dieciséis
años, oyó o leyó en alguna parte, o bien intuyó por sí mismo, que la vida se
resuelve siempre en fracaso. Siempre sin excepciones.
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¿Cómo
pudiste consentir que se casara con un viejo, y que pusiera sus sucias manos en
una niña de catorce años?
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…y
entonces volvió a preguntarse, esta vez con una intención y una hondura desconocidas
hasta ahora, quién era en el fondo Gabriel, con qué tipo de hombre se había
casado en realidad.
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Todo
su negocio sentimental se reduce a que han encontrado un lugar seguro donde
enterrar su hueso, y ya por eso se creen que están hechos el uno para el otro.
No, no se aman; solo se emparejan. Se emparejan porque las noches son frías y
la soledad estállenla de monstruos, solo por eso.
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EL BOBO DE KORIA (RECOPILADOR)
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