Conmoción
en el mundo del deporte. Sí, e indignación en el de la justicia, la
cultura,y la inteligencia. Todos los noticieros abren con la
“tragedia” dotándola de una grandeza de la que carece. Un
descerebrado irresponsable, para más inri con dinero, y para mayor
despropósito futbolista. Esos gladiadores modernos fabricados para
ser adorados e idolatrados, que envenenan a los niños que los imitan
en sus excéntricos peinados, en sus modas y en sus modos. Cretinos
que no saben ni escribir su nombre, y cuyo mayor logro es servir, sin
siquiera saberlo ¿Se habrán preguntado alguna vez porqué ganan
tanto dinero? Ya se lo digo yo: Para ser un patán toda su vida, que
no tiene opinión propia sobre ningún tema y no se mete en asunto
que lo pueda comprometer. Ineptos chupa culos, orangutanes salidos
con la única ambición de acumular una fortuna cuya cifra no saben
leer, y copular como conejos.
Un
héroe que en realidad es un asesino que se ha cepillado a su primo y
ha dejado al otro para el arrastre, podemos suponer que los tres
andarían a la zaga en inteligencia y sentido común. A más de 200
kms por hora circulaba el tarugo cuando perdió el control de su
súper coche ¿Qué habría pasado de circular alguien en sentido
contrario? Cabría la posibilidad, dada su actitud, de que en los
medios se preguntaran que qué hacía aquel coche por allí, cuando
nuestro futbolista se estaba divirtiendo.
El
tipo deja dos niñas pequeñas cuyos traumas empapelarán con
billetes, siguiendo la tradición de los nuevos ricos, que pueblan la
tierra de desgraciados.
Pero
el asunto verdaderamente peliagudo es el tratamiento mediático, en
largos reportajes, con las opiniones de directivos, entrenadores y
futbolistas, que no dudan en abrir la puerta de los estadios para
mostrar el ataúd como si del vestíbulo del Olimpo se tratara.
Mientras tanto intelectuales, científicos, poetas, mujeres y hombres
de un Renacimiento perpetuamente cercenado nos abandonan en el
olvido. Un legado intelectual que se perderá irremediablemente. Se
me viene a la cabeza Francisca Aguirre, y Rafael Sánchez Ferlosio
cuyas recientes muertes ya nadie sabría situar en un calendario.
Hay
una guerra soterrada contra la inteligencia, contra la libertad de
pensamiento. Una guerra que nos empuja a las cavernas, a la oscuridad
donde gobiernan las religiones y las dictaduras. En ese lugar, el
miedo es la moneda de cambio y el control está destinado a acabar
con los Prometeos, con los anómicos, los delitos por herejías
volverán a resurgir, la alineación provocada por la tecnología nos
llevará al abismo y lo que parece una distopía mañana será una
realidad irreversible al igual que las vaticinadas hace décadas hoy
son nuestro presente.
El
cura, ayudado por el barbero seguirá quemando libros y creando
“Caballeros de los espejos” con la seguridad de que caeremos
embrujados por los reflejos de su armadura.
Una
anécdota para acabar:
Tengo
un amigo cuyo hijo de seis años adora el fútbol. Lo conozco desde
que nació, he jugado con él, siempre que voy a verlo le llevo
cuentos o instrumentos musicales, pero hace meses que no consigo de
él ningún gesto cariñoso. Lo respeto, incluso cuando su padre
insiste para que me dé un beso. Yo lo dejo correr, restándole
importancia.
Hace
poco en un partido de fútbol tuvo la oportunidad de conocer a su
ídolo del balompié ¿ Creen ustedes que le surgió alguna duda a la
hora de lanzarse a su cuello con total entrega?
Los
paraísos no existen. Pero empujamos a nuestros hijos a buscarlos,
los entregamos en manos de bestias a las que no queremos comprender.
Puestos
a creer, ese es el peor de los infiernos.
Yorick.
1 comentario:
Sr. Yorick:como siempre da en el clavo. Estos días me revolvía pensando en cómo manifestar mi indignación ante la manifestación dela enorme estupidez que la muerte del balompédico aciago ha suscitado en los medios de formación de masas. Usted lo ha dicho acertadamente.
SAlud y malaleche.
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